En su visita de ayer jueves a Yucatán, la corcholata presidencial de Andrés Manuel López Obrador, Claudia Sheinbaum Pardo, se vio inmersa en una serie de situaciones que podrían considerarse como una «gira de aclaraciones». Desde su llegada al Tren Maya acompañada del candidato del partido Morena y sus satélites PT y PVEM a la gubernatura, Joaquín “Huacho” Díaz Mena, se esforzó por desmentir rumores sobre su relación, enfatizando que la supuesta tensión es simplemente parte de una campaña de desprestigio.
El acarreo pagado en Tizimín, con cientos de personas transportadas desde Tulum y otros poblados del vecino estado de Quintana Roo, fueron testigos y protagonistas de imágenes que circularon sobre el descarado pago en efectivo de algunos asistentes. Eso sí, pusieron al principal “chapulín” en su lugar: ufano de su oratoria Jorge Carlos Ramírez “El Cerdito” Marín no tuvo acceso al micrófono.
Los acarreados escucharon cómo Sheinbaum se vio nuevamente en la posición de aclarar malentendidos, esta vez sobre sus comentarios anteriores acerca de imponer a su cercana Marcela Figueroa Franco una experta yucateca en seguridad. De cara a Jessica Saidén Quiroz, quien esta vez brincó a Morena para su postulación segura como candidata a diputada federal, dijo se ha invitado al comandante Luis Felipe Saidén Ojeda a continuar en su cargo… si Morena gana la gubernatura.
