Medio Alternativo del Sureste.- 10 de abril de 2015.- El Senado de México aprobó hoy una reforma legal que autoriza el porte de armas en territorio nacional por parte de agentes extranjeros de migración, aduanas y seguridad, y la remitió a la Cámara de Diputados para su ratificación.
Por 78 votos en favor, 20 en contra y dos abstenciones, los senadores aprobaron el dictamen que reforma la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, a raíz de una iniciativa enviada por el Ejecutivo federal, informó el Senado en un comunicado.
De acuerdo con el boletín, el objetivo es “generar una nueva regulación que fortalezca procesos de cooperación migratoria y aduanera de México con el mundo, principalmente en lo referente a los procesos de preinspección aduanera, bajo el principio de reciprocidad”.
El dictamen aprobado plantea que funcionarios aduanales mexicanos que lleven a cabo funciones de preinspección de mercancías en otros países estén autorizados para llevar consigo las armas con que cuentan para el desempeño de sus funciones.
A partir del principio de reciprocidad, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) será la que autorice el porte temporal de armas a los agentes extranjeros que participen en la revisión migratoria en puntos de tránsito internacionales o en el despacho conjunto de mercancías en las aduanas nacionales.
También podrán portar armas en suelo mexicano los agentes de seguridad extranjeros en el marco de las visitas oficiales de jefes de Estado o de Gobierno, ministros y equivalentes.
La autorización cubre el porte de revólveres o pistolas semiautomáticas cuyo calibre no sea a superior a .40 o equivalente.
Los permisos serán tramitados con al menos 15 días de anticipación al inicio de la comisión, y tendrán una vigencia de seis meses en el caso de los agentes migratorios y aduanales. En cuanto a los agentes de seguridad el permiso solo será vigente durante el tiempo que dure su encargo oficial.
El documento precisa que en los permisos extraordinarios para agentes aduanales y migratorios, la Sedena determinará el arma autorizada, la instalación en que será válida el porte y demás límites o restricciones aplicables.
Para los agentes de seguridad, en casos excepcionales se podrá autorizar el ingreso y porte de otro tipo de armas, siempre que a juicio de la Secretaría de la Defensa Nacional se justifique la necesidad de ello.
Al presentar el dictamen, el presidente de la Comisión de la Defensa Nacional, Fernando Yunes, del conservador Partido Acción Nacional (PAN), aseguró que la iniciativa no vulnera la soberanía nacional ni atenta contra los derechos y libertades de los mexicanos.
Por el contrario, añadió, se busca incorporar a México dentro de los países con potencial turístico y económico de primer mundo, y hacerlo más competitivo.
La presidenta de la Comisión de Gobernación, Cristina Díaz, del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), dijo que los cambios al ordenamiento no implican un sometimiento de una nación a otra.
“Nuestro país cuenta con una de las legislaciones más estrictas en materia de armas de fuego a nivel internacional y los extranjeros deberán cumplir con ella”, aseguró.
En su posicionamiento, el senador Manuel Bartlett, del izquierdista Partido del Trabajo (PT), aseguró que la propuesta violenta el artículo 89 constitucional en cuanto a los principios de no intervención y autodeterminación de los pueblos, porque el monopolio de la fuerza pública dejará de existir y se compartirá con Gobiernos extranjeros.
Angélica de la Peña, del también izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), sostuvo que representa un riesgo permitir el porte de armas a personal extranjero, en particular de migración, pues “han asesinado a migrantes mexicanos haciendo uso de las armas letales que portan”.
“Lo han hecho en Estados Unidos y en territorio mexicano. Sabemos cómo son, por eso tenemos la legítima preocupación sobre cuáles pueden ser las terribles consecuencias”, manifestó.