Morena impone cambios que abren la puerta al crimen y delincuencia donde gobierna

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La postura de Claudia Sheinbaum por imponer a una mujer al frente de la seguridad en Yucatán en caso de ganar la gubernatura con Huacho ha encendido los focos de alerta para los yucatecos, pues ahí donde Morena ha cambiado el sistema de seguridad la criminalidad recrudece, y para muestra; Quintana Roo, donde Mara Lezama, la gobernadora nombró a un funcionario que de forma autoritaria la 4T desechó imponiendo a un mando militar.

La visita de la “corcholata” presidencial sembró grandes dudas sobre el seguimiento del modelo yucateco policiaco, elogiado hasta por el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador e irremediablemente remitió a los graves problemas de inseguridad que se viven en Campeche, donde la gobernadora morenista Layda Sansores Sanromán “importó” de la Ciudad de México a su jefa policiaca, y en Quintana Roo, donde María Elena Hermelinda Lezama Espinosa nombró un jefe policiaco, que al poco tiempo fue desplazado por un mando militar.

Tanto en Campeche como en Quintana Roo el crimen organizado, la delincuencia y la inseguridad han crecido con la llegada de los gobiernos de Morena, a pesar de sus mandos impuestos desde el centro.

De acuerdo con la asociación civil “Causa en Común”, de 2021 a la fecha el gobierno de la llamada Cuarta Transformación ha impuesto a 53 mandos militares al frente de las policías estatales y municipales. Actualmente son 11 los gobernadores, casi todos morenistas, que aceptaron la imposición de mandos policiacos desde el centro, son los de Baja California, Baja California Sur, Colima, Guerrero, Morelos, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala y Zacatecas.

La “corcholata” presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo, adelantó que si su partido gana la gubernatura yucateca, la entidad se sumaría a la lista de gobiernos locales con imposición de mandos policiacos desde el centro. Y fue más allá: dibujó que si Joaquín Díaz Mena obtiene el triunfo, la Secretaría de Seguridad Pública de Yucatán dejará de estar en manos de Luis Felipe Saidén Ojeda, “porque se requiere honestidad, se requiere un buen equipo”.

La delfina de la 4T fue más allá: presentó e hizo que se ponga de pie su bincondicional Marcela Figueroa Franco, quien está al frente de la policía de Ciudad de México. Enfatizó que la jefa policiaca “es orgullosamente yucateca”. Y de ese modo, calló al precandidato morenista a la gubernatura Joaquín Díaz Mena, quien apenas horas antes dijo que, de ganar, solicitaría al comandante Saidén Ojeda que permanezca al frente de la SSP seis años más.