Arbitrariedades, despojos, protección a delincuentes y abuso de poder cometidos contra el empresario José María Ponce Laviada, son sólo una muestra del verdadero Yucatán:
Mientras el gabinete del Gobernador Mauricio Vila Dosal se tambaleaba con la renuncia del Fiscal, Wilbert Cetina Arjona, por pujas de poder con el Titular de la SSP, Luis Felipe Saidén Ojeda, en medio de acusaciones mutuas de protección a la delincuencia, se suma ahora un nuevo escándalo de excesos y abusos a manos del cuerpo policiaco estatal, en contra del empresario José María Ponce Laviada.
El caso ya fue denunciado ante la Fiscalía Estatal, y será presentado a la Fiscalía General de la República puesto que se cometieron delitos de competencia de la Federación. Se cuenta con documentación plena que sustenta la agresión, intimidación, encubrimiento, contubernio y extorsión, y ha solicitado se investigue a autoridades estatales como la SSP y el IVEY que están directamente vinculadas, así como a autores intelectuales en altas esferas empresariales ligadas estrechamente al Gobernador del Estado.

En entrevista con el empresario, quien aceptó fuera grabada para los registros de este medio, éste señaló entre otras cosas que:
Ha sido objeto de todo tipo de amenazas hasta de muerte, agresiones, quebrantos y saqueos, de manera ininterrumpida a cargo de autoridades estatales desde la administración de Ivonne Ortega Pacheco, la de Rolando Zapata Bello e incluso la actual administración del Panista Mauricio Vila Dosal, a quien califica como “un falso líder que ejemplifica a la perfección el término PRIAN, que se hizo famoso durante la campaña electoral del Presidente AMLO”, auspiciadas por el mismo grupo de poderosos, a quienes también señala de “encarnar la ahora famosa frase de la MAFIA DEL PODER que ha denunciado igualmente el Presidente López Obrador”.
El origen de tales agresiones ha sido negarme a participar y oponerme de manera categórica, en los enormes fraudes que han realizado este grupo de empresarios con estas autoridades corruptas, y persistir en la meta de lograr verdaderos proyectos de desarrollo sustentable y alto impacto social y económico, que evidentemente incomodan todos a estos rateros. – señaló Ponce Laviada.
El empresario José María Ponce Laviada nos manifestó que por este momento se reserva la identidad de los empresarios antes señalados, para abordar el tema en una siguiente entrevista, pero no dudó en señalar que un nombre ha aparecido en todas las acciones en su contra, la del Comandante Luis Felipe Saidén Ojeda, Titular de la Secretaría de Seguridad Publica desde el año 2007, que ha sido el brazo ejecutor de todas estas agresiones a su persona, a sus empresas, e incluso recientemente a un hijo suyo MENOR DE EDAD, en una propiedad privada de la costa donde entraron de manera ilícita 5 patrullas a propinar senda golpiza a una decena de muchachos, evento que solicitó sea objeto de una posterior entrevista, “por considerarlo de máxima gravedad, y una última y evidente señal de advertencia para el pueblo Yucateco, respecto del enorme peligro de seguir evadiendo el deber y derecho cívico de denunciar creciente la corrupción que ha imperado en el Estado”.
Respecto de los eventos violentos e ilegales recientes, en contra de una propiedad donde se pretendían conjugar actividades productivas de las agroindustrias henequenera y forestal, agregó que:
Hace algunos días se informó en varios medios de una denuncia por invasión violenta, robo y destrucción, sobre una planta desfibradora de henequén y aserradero, que Ponce Laviada ha ocupado de manera pacífica e ininterrumpida desde 1992, según acreditó en su demanda.
De acuerdo con la denuncia interpuesta por el empresario, el pasado viernes 31 de octubre, un grupo de golpeadores armados con mazos, picos y palas, así como maquinaria pesada, ingresó a su desfibradora a saquear inventarios, maquinaria, equipos e instalaciones, y destruir una nave industrial de 3,500 M2 y cerca de 400 M2 de oficinas y bodegas de obra civil, amenazando a un par de veladores, quienes no pudieron hacer otra cosa más que dar parte a la Policía Municipal de Muxupip.
-Los golpeadores, se negaron a dar otra información, más que actuaban a nombre de un tal Carlos Méndez, originario de Motul, y quien según ellos era propietario del terreno donde se encuentra la Desfibradora Felipe Carrillo Puerto.
-Cuando los cuidadores dieron aviso a la policía de Muxupip, los elementos llegaron al lugar de forma inmediata, y lo cercaron para evitar que varios de los golpeadores escaparan.
-En contraste, arribó al lugar la patrulla de la SSP número 6664, con un Comandante de nombre Oswaldo Dorantes, protegiendo deliberadamente a los delincuentes en lugar del agraviado, e impidiendo que el empresario pudiera ver la identificación del tal Carlos Méndez, ni de un papel que según el Comandante le daba derechos. Más aún, sacó de la propiedad a Ponce Laviada y a dos sus empleados, sin dar más razón que “estar procediendo conforme a la línea directa del Secretario de Seguridad Pública», una frase que Ponce Laviada interpreta como un obvio intento de intimidación. Acto seguido el Comandante Dorantes, en facultades que no corresponden a la SSP, «informó que el inmueble quedaba asegurado por la SSP» ¿acaso el Comandante ya es Fiscal o Juez? -se pregunta Ponce Laviada.
-Únicamente un empleado logró esconderse dentro del predio, pero al ser descubierto fue sacado de manera violenta y con graves amenazas en la madrugada del día siguiente, exhibiendo una foto del estado en el que encontró a su empleado en el camellón de la entrada al poblado de Muxupip. – declaró y exhibió ante este medio el empresario.
-El caso no queda ahí, pues el Comandante Dorantes le advirtió al empresario, supuestamente de parte del Secretario Luis Felipe Saidén Ojeda, que no se atreviera a presentar una denuncia ante la Fiscalía, por su propia seguridad… Ponce Laviada hizo caso omiso, y procedió a ejercer su derecho de denunciar los actos en la Agencia de la Fiscalía en Motul, y al concluirla regresó a la planta sólo para observar que la SSP había dejado entrar de nuevo a los gamberros y delincuentes a seguir destruyendo y saqueando los inmuebles. -continuó relatando Ponce Laviada.
Los vídeos e imágenes del inmueble son desoladores, y muestran una destrucción y saqueo total. Además de la obra civil, maquinaria, equipo e instalaciones en proceso, destaca un inventario multimillonario de maderas preciosas, que Ponce Laviada acredita su legítima procedencia mediante oficios y reembarques forestales emitidos a su nombre por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales. El daño económico se estima rebase los $30 millones, no obstante, se siguen valorando los bienes destruidos y/o robados, y la cantidad podría resultar muy superior, pues el acoso de la SSP ha impedido realizar una inspección apropiado en el sitio. – explicó Ponce Laviada.
Acto seguido Ponce Laviada nos mostró su Permiso de Centro de Almacenamiento de Materias Primas Forestales, el cual es una concesión de competencia Federal, y según nos explica, la invasión y saqueo representa un delito muy grave, que será también denunciado ante la Fiscalía General de la República, destacando que la SSP sería directamente responsable de participar y encubrir este delito.
-A pesar de la denegación de justicia, y las acciones violentas que incluso llegaron al grado de “levantarme para propinarme un paliza, por órdenes directas de la ex-Gobernadora», el empresario con evidentes señales de malestar y frustración, solicitó por este medio mandar un mensaje contundente a las autoridades estatales: “Ni voy a rendirme, ni voy a ser cómplice de gobernantes, funcionarios públicos y empresarios corruptos, y no descansaré hasta que se haga justicia, se dejen de violar los Derechos Humanos, y se respete el Estado de Derecho en Yucatán”, después de lo cual agrego, “es increíble e inhumano que en medio de la actual crisis sanitaria y económica sin precedentes, las autoridades y empresarios corruptos de este Estado estén más voraces que nunca”. – concluyo Ponce Laviada.